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Una sonda lambda, también conocida como un sensor de oxígeno, es un componente crucial en los motores de combustión interna. Esta monitorea los niveles de oxígeno en los gases de escape, ayudando a la unidad de control del motor (UCM, o ECU en inglés) a ajustar la relación aire-combustible para un rendimiento óptimo, eficiencia de combustible, y control de emisiones. Las sondas lambda juegan un papel clave en cumplir con las estrictas regulaciones ambientales y asegurar la longevidad del motor. |
Una sonda lambda mide el contenido de oxígeno en el sistema de escape y envía estos datos a la ECU. Basada en estas lecturas, la ECU ajusta la inyección de combustible para mantener una óptima mezcla aire-combustible, típicamente en una relación 14,7:1 (estequiométrica). Este proceso ayuda a reducir las emisiones y mejora la eficiencia del motor. Hay dos tipos de sondas lambda:
Una sonda lambda que está fallando puede llevar a múltiples problemas de rendimiento del motor y puede resultar en una evaluación fallida (como la ITV en España). A continuación, se presenta una tabla señalando los problemas más comunes y sus posibles causas:
Síntoma | Posible Causa |
Poca economía de combustible | Lecturas defectuosas conllevan a una mezcla aire-combustible incorrecta. |
Notificación en el tablero de falla de motor | La falla de la sonda activa códigos de error. |
Mínimo (ralentí) inestable o se apaga | Datos incorrectos del nivel de oxígeno afectan el rendimiento del motor. |
Aumento de emisiones | Una sonda defectuosa impide regular las emisiones adecuadamente. |
Para diagnosticar una sonda lambda defectuosa, los profesionales utilizan herramientas de diagnóstico como analizadores de gases de escape o escáneres OBD-II. Probar el sensor con un multímetro puede confirmar fluctuaciones de voltaje, las cuales indican si el sensor está operando correctamente.
La vida útil de una sonda lambda depende de las condiciones de manejo, calidad del combustible, y uso del motor. La mayoría de los fabricantes recomiendan reemplazar el sensor cada 80.000 a 150.000 kilómetros o 60.000 a 100.000 millas. Siempre revise el intervalo recomendado por el fabricante. Sin embargo, si aparecen problemas de rendimiento, puede ser necesario un reemplazo temprano.
Las sondas lambda varían según el diseño y la aplicación. Los tipos más comunes incluyen:
Wilmink Engine Parts ofrece una gama de sondas lambda de alta calidad de marcas reconocidas, incluyendo:
Las sondas lambda cumplen papeles esenciales en muchas aplicaciones, incluyendo: